ESTIMULACIÓN TRANSCRANEAL POR IMPULSOS (TPS)

1. ¿QUÉ ES LA TERAPIA TPS?

TPS

La Estimulación Transcraneal por Impulsos (TPS por sus siglas en inglés: Transcranial Pulse Stimulation) es una técnica de neuromodulación no invasiva, basada en la aplicación de ondas acústicas de ultrasonido focalizadas, generadas por el dispositivo NEUROLITH®.

Estas ondas atraviesan el cráneo sin necesidad de intervención quirúrgica, alcanzando estructuras subcorticales hasta una profundidad de 8 cm.

Su mecanismo de acción se basa en la mecanotransducción: la aplicación de pulsos acústicos provoca reacciones biológicas como la liberación de óxido nítrico, la estimulación de la microcirculación y la activación de factores de crecimiento vascular (VEGF) y factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF). Estos efectos pueden favorecer la perfusión cerebral, la plasticidad neuronal, la angiogénesis y la regeneración del tejido nervioso.

¿ESTÁ APROBADO NUESTRO DISPOSITIVO DE TPS COMO TRATAMIENTO DE ALGUNA ENFERMEDAD NEUROPSIQUIÁTRICA?

En lo que respecta a la finalidad terapéutica, en la actualidad, el dispositivo utilizado por nuestra Unidad (NEUROLITH®) cuenta con certificado europeo para el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer en estadios iniciales o moderados

Existen otros trastornos neuropsiquiátricos (depresión resistente, esclerosis, Parkinson, autismo, ataxias…) para las que el uso de la TPS ha demostrado resultados prometedores en estudios científicos. Sin embargo, la utilización en estas patologías debe ser considerada como experimental, pues actualmente no cuenta con la aprobación por las principales agencias internacionales de medicamentos.

ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA POR IMPULSOS

¿CÓMO SE REALIZA LA TERAPIA CON TPS?

Se espera una mejoría de las funciones cognitivas como la memoria, atención y lenguaje, tanto en fases iniciales como intermedias del deterioro cognitivo. Esta mejoría puede manifestarse progresivamente a lo largo de las fechas posteriores a la terapia.

Algunos estudios clínicos también han encontrado una mejoría en otras manifestaciones clínicas neurológicas y psicopatológicas, mostrando reducciones significativas en aspectos como la ansiedad, agitación, irritabilidad o depresión.

 

Los estudios clínicos indican una duración del efecto beneficioso de entre 4 a 12 meses tras la finalización del protocolo estándar. Por ello, en caso de respuesta positiva, suele ser recomendable la instauración de un protocolo de mantenimiento, con sesiones distanciadas entre 4 y 6 semanas, habitualmente. 

TPS
¿QUÉ BENEFICIOS TIENE LA TPS FRENTE A TRATAMIENTOS CONVENCIONALES?

Durante décadas, el tratamiento de los trastornos neuropsiquiátricos se ha basado principalmente en la farmacoterapia, la psicoterapia o programas de estimulación cognitiva. Si bien estas intervenciones han demostrado utilidad en muchos casos, también presentan limitaciones importantes.

Los fármacos, por ejemplo, ejercen su efecto de forma generalizada, lo que con frecuencia provoca efectos secundarios indeseables. Además, su eficacia puede ser parcial o insuficiente, y no todos los pacientes logran estabilizarse con medicación.

Por su parte, las intervenciones como la psicoterapia o estimulación cognitiva requieren un alto grado de implicación, continuidad y capacidad de aprendizaje, lo que limita su efectividad en pacientes con deterioro más avanzado. 

Frente a estas limitaciones, la Estimulación Transcraneal por Impulsos (TPS) se presenta como una alternativa innovadora, no invasiva y con un enfoque neuromodulador directo, que ha mostrado beneficios terapéuticos en trastornos como la enfermedad de Alzheimer, la depresión resistente, el deterioro cognitivo leve y otras patologías neurológicas.

Entre sus principales ventajas destacan su acción focal y profunda, induciendo neuroplasiticidad y regeneración, mediante un abordaje ambulatorio rápido y bien tolerado. 

¿TIENE EFECTOS ADVERSOS LA ESTIMULACIÓN TRANSCRANEAL POR IMPULSOS?

La terapia TPS es generalmente bien tolerada. Los efectos adversos más frecuentes son leves y transitorios:

  • Molestia o presión leve en la zona de aplicación.
  • Fatiga leve posterior a la sesión.
  • Raramente, dolor de cabeza o sensación de mareo.

Efectos secundarios poco frecuentes:

  • Irritación cutánea por contacto con el gel.
  • Ansiedad o agitación leve.

No se han reportado efectos adversos graves hasta la fecha en los estudios clínicos disponibles. Sin embargo, como cualquier intervención médica, no puede garantizarse una total ausencia de riesgos.

¿EXISTE ALGUNA CONTRAINDICACIÓN PARA RECIBIR LA ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA TRANSCRANEAL?

La terapia TPS no debe aplicarse en los siguientes casos:

  • Presencia de tumores intracraneales.
  • Episodios recientes de epilepsia o convulsiones no controladas.
  • Implantes metálicos o electrónicos en el cráneo o cerebro.
  • Traumatismos craneales recientes (menos de 3 meses).
  • Embarazo (contraindicación relativa; debe evaluarse caso a caso).
  • Patologías cerebrales agudas (hemorragia, infarto cerebral en fase aguda, etc.).
¿DÓNDE Y EN QUÉ CONDICIONES SE REALIZA LA TPS?

La TPS se lleva a cabo en la privacidad de una consulta médica privada, sin necesidad de preparación previa, anestesia, sedación ni de hospitalización

El paciente que se somete al tratamiento está completamente despierto y alerta, sintiendo las ondas de choque como una ligera sensación de golpeteo en el cuero cabelludo mientras está sentado en un sillón confortable, conversando o relajándose. Al terminar la sesión de 30 minutos, el paciente puede retomar su rutina laboral y familiar. Por lo tanto, la TPS  te permite continuar con tu vida personal, tras las sesiones de tratamiento.

Se espera una mejoría de las funciones cognitivas como la memoria, atención y lenguaje, tanto en fases iniciales como intermedias del deterioro cognitivo. Esta mejoría puede manifestarse progresivamente a lo largo de las fechas posteriores a la terapia.

Algunos estudios clínicos también han encontrado una mejoría en otras manifestaciones clínicas neurológicas y psicopatológicas, mostrando reducciones significativas en aspectos como la ansiedad, agitación, irritabilidad o depresión.

Los estudios clínicos indican una duración del efecto beneficioso de entre 4 a 12 meses tras la finalización del protocolo estándar. Por ello, en caso de respuesta positiva, suele ser recomendable la instauración de un protocolo de mantenimiento, con sesiones distanciadas entre 4 y 6 semanas, habitualmente.

¿CUÁL ES EL PROTOCOLO DE UNA TERAPIA CON TPS?

El protocolo estándar de tanda aguda recomendado de la terapia TPS consta de 6 sesiones en el transcurso de 2 semanas, aplicándose 3 sesiones semanales (por ejemplo: lunes, miércoles y viernes) durante 2 semanas consecutivas. Tras ello, en caso de buena respuesta, está indicada la aplicación de una sesión de mantenimiento cada 6 semanas, aproximadamente. No obstante, es el médico responsable el que decidirá el número exacto de sesiones tras valoración personalizada del caso.

¿ES LA TPS LA MEJOR OPCIÓN PARA TI? CONTACTA CON NOSOTROS

Contacta con nosotros en el 622 29 04 07 o mediante un correo electrónico a info@institutoandaluzdesaludcerebral.com y explícanos tus circunstancias personales para crearte un plan de tratamiento individualizado. 

Nuestro objetivo es proporcionarte la mejor opción de TPS utilizando la última tecnología en neuromodulación con la finalidad de recuperar tu salud cerebral.